El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dispuso este lunes aplicar fuertes multas a quienes sean sorprendidos revolviendo contenedores de basura y generando suciedad en la vía pública.
La medida fue instruida directamente por el jefe de Gobierno de la capital argentina, Jorge Macri, quien ordenó a la Policía de la Ciudad y al Ministerio de Seguridad intervenir en estos casos y exigir la limpieza inmediata del área afectada. La gestión sostiene que la política busca preservar la higiene urbana y prevenir daños al mobiliario público.
Di la orden al Ministerio de Seguridad y a la Policía de la Ciudad que, si encuentran a alguna persona o grupo de personas removiendo basura de los contenedores y ensuciando nuestra ciudad, les exijan que limpien y ordenen todo de inmediato.Si se niegan, que los sancionen según… pic.twitter.com/437CgfmYWv
— Jorge Macri (@jorgemacri) August 4, 2025
De no cumplir con esa orden, los involucrados serán sancionados conforme al artículo 94 del Código Contravencional, que prevé penas de 1 a 15 días de trabajos de utilidad pública o multas de hasta 890.544 pesos (656 dólares). Las sanciones se duplican si la infracción ocurre desde un vehículo o si afecta bienes públicos sensibles, como monumentos o templos, reportó El Economista.
La vocera del Gobierno porteño, Laura Alonso, anunció la medida a través de su cuenta de la red social X, en un posteo en el que citó al alcalde, Jorge Macri, y que recibió varias críticas.
En su mensaje, Alonso señala que "si te gusta hurgar la basura", afrontarás las sanciones mencionadas. Este comentario fue de los más cuestionados por quienes consideran que hurgar la basura no se hace por gusto sino por necesidad. También se preguntaron cómo podrían cobrarle una sanción económica a una persona que busca sobrevivir con lo que encuentra en los residuos.
La estrategia oficial, además de multas, incluye monitoreo con patrullajes, controles a comercios y campañas para mejorar la disposición de la basura que los vecinos sacan de sus casas. No obstante, será tarea del Gobierno de Buenos Aires conciliar el orden urbano y la limpieza con políticas que no criminalicen la pobreza.